EL SHOW DE LA NOCHE

Anoche entró una serpiente en mi casa, no sé por donde, pero me dí cuenta de su existencia en el momento en que mi gata saltó directamente desde la barandilla de la escalera y adoptó la típica postura felina para cazar; fué en ese momento cuando la ví, asomando su estilizada cabeza y parte de su esbelto cuerpo en el comedor. Mi reacción fué subirme rapidamente encima de la silla y llamar a mi hijo para que solucionara el problema. La imagen resultaba bastante cómica, porque la gata se asustó al ver a la serpiente, la serpiente se asustó al ver a la gata y yo me susté al ver a la serpiente. Para refugiarse el animal se escondió debajo de un baúl que tengo en el salón, decidí echarla de su escondite con el palo de la escoba, pero cuando por fin salió se refugió debajo del sofá...allí ya se complicaba lo de los escobazos, así que mi hijo decidió capturarla con las manos, para lo cual le dí la manopla de la cocina para que la usara de protección; así que introdujo su mano "enmanoplada"debajo del sofá hasta que por fin cogió a la serpiente, esta se enrolló en su brazo (1 metro y medio de serpiente aproximadamente) y le pegó un mordisco a la manopla, pero así enrollada y todo, mi hijo consiguió lanzarla a la calle y ver cómo se introducia por un agujero subterráneo, lo cuál me tranquilizó. Era la primera vez que tenía tan cerca un animal de este tipo, cuando mi hijo se acercaba emitía el tipico sonido :"ssssssssssss"...lo cual hacía que me acojonara más todavía, lo que más miedo me daba era que me mordiera y me pegara alguna enfermedad rara, que sé yo...la rabia por ejemplo. Menos mal que todo acabó bien, pero...¡vaya nochecita !.