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sábado, 27 de agosto de 2011

LA IMPACIENCIA


Si, lo reconozco, SOY IMPACIENTE. No se trata de que vaya por ahí metiendo prisa a la gente, pero no me gusta tardar una semana en hacer algo cuando en realidad poniendome manos a la obra puedo tardar un dia o dos como mucho. Pués resulta que mi pareja es todo lo contrario, puede tardar años en hacer lo que como mucho se tarda un mes o dos. Siempre ha sido así, he tenido que ir empujándolo. Cuando eres impaciente tienes dos opciones, o hacerlo todo tú (es muy fácil caer ahí) o delegar e intentar llevar el ritmo de la otra persona. La cosa es complicada, porque si hago las cosas sola, gasto mucha energía, porque lo que hago lo hago mosqueada porque el otro no colabora, y si dejo de hacer cosas para que él las haga, me enfado porque su ritmo es demasiado lento para mí. Por lo que he llegado a la conclusión de que vivir en pareja es vivir enfadada. Si me enfado con él, después pienso que no soy tolerante y no respeto sus ritmos y si no me enfado pienso que no es bueno callarse las cosas cuando no me gusta algo de su comportamiento.
En fin, hoy os estoy calentando bien la cabeza, pero es que esto de ser impaciente es un problema cada dia más importante en mi relación de pareja. No me gusta dejar las cosas para mañana cuando puedo hacerlas hoy, mañana ya descansaré.
Menos mal que tengo siempre a mano las flores de Bach, que me aportan tranquilidad.

6 comentarios:

añil dijo...

Jajajaja. me encanta lo que cuentas, creo que ya somos dos las impacientes sufridoras de parejas pacientes.
Mi tercera opción, a veces, es aceptar que la cosa en cuestión se quede sin hacer.

Un beso

trinidad dijo...

Hola Añil, el problema es que hay cosas que hay que hacerlas y él me dice:si, si, yo lo hago,pero al final o lo hago yo o lo hace cuando me enfado. En fin...veo que me entiendes y eres otra sufridora como yo,besos.

mariajesusparadela dijo...

Hay más soluciones:
-Cambiar de pareja
-dejarlo sin hacer
-adaptarse a su ritmo...

Me pregunto si arreglas enfadándote; si es más importante la armoía mental y emocional o el qrreglo de algo exterior(la casa, por ejemplo).Supongo que lo amas. Pues eso es lo importante, lo demás es superficial, creo. Porque ya era así antes ¿a que sí?: ¿te propusiste cambiarlo?¿por qué? si lo amas, lo amas entero. Como él a ti.
A que al principio de la relación no te importaba que fuese lento y eso era un motivo para quererlo más? Algo ha cambiado. Pero no en él: en ti.
(A veces nos complicamos la vida con unas cosas...)(Las mejores flores son la paciencia y la reflexión. Y son gratis.

trinidad dijo...

Maria Jesús, gracias por tu comentario, siempre es bueno que alguien vea las cosas desde fuera.Me gusta que me visites.
Es cierto que él siempre ha sido así y que esa tranquilidad suya me gustaba, también es cierto que debo de plantearme si vale la pena estar casi siempre enfadada con él o tomarme la vida con más tranquilidad. Cómo tú bien dices hay que reflexionar y tener paciencia. Bersos.

Carlos dijo...

Hola, Iris. Hacia tiempo que no venía a verte. No es fácil para un impatiens respetar el ritmo de los demás y está bien que seas como seas porque el mundo sin impatiens no sería lo que es. Suerte que tienes un espejo que te muestra lo que no quieres ver, ¿no?. Mi pareja haces, sin quererlo, lo mismo y es que por eso buscamos parejas para vernos, porque sino no habría forma. Un besito

trinidad dijo...

Hola Carlos, como tú bien sabes me gusta mucho que pases por mi rincón, porque tus palabras siempre demuestran una gran sabiduria detrás de elllas. Pués si, tengo un gran espejo en el que reflejarme todos los dias y eso hace que evolucione más como persona, lo que pasa es que a veces los Impatiens también nos cansamos, bueno seguiré delegando poco a poco a ver que pasa. Besos, pásate cuando quieras, mis puertas siempre estarán abiertas para ti.